El Presidente de la FEMP, Abel Caballero, anunció en Vigo que “queremos empezar a hablar de financiación tan pronto esté constituido el nuevo Gobierno, de forma inmediata, antes de que empiece a hablar con las Comunidades Autónomas”, y ha subrayado que “vamos a hacer demandas solventes, avaladas porque somos la única Administración que cumple con creces y holgadamente los compromisos con Europa”.
El Presidente ha recordado que el superávit de la Administración Local se situará, previsiblemente, en los 4.500 millones de euros, un 0,45% del PIB que “aportamos al cumplimiento de objetivos europeos”. Y por este motivo, “queremos ser tratados de forma diferente”. “Esta vez –ha insistido- no estamos dispuestos a quedar ladeados y marginados, a esperar que se decida la financiación del Estado Central y la de las Comunidades Autónomas y después, residualmente, la de Ayuntamientos y Diputaciones”.
Mal Gobierno con los Ayuntamientos
Según señaló, en relación con la FEMP y con los Ayuntamientos, el último Gobierno de Rajoy “fue un muy mal gobierno”, especialmente a causa de la LRSAL “una ley antimunicipalista cuya derogación demandamos la mayoría de la FEMP”.
De hecho, ha incidido, una parte importante de aquella ley la derogó el Tribunal Constitucional, y otra parte la tuvo que derogar el propio Gobierno “de una forma especial, que es a través de una carta, diciendo que una parte de la ley no está en funcionamiento, que no se tiene que cumplir”.
Además de la derogación de la norma, Abel Caballero ha pedido que, si se produce una reforma constitucional, las Entidades Locales estén contempladas en el nuevo texto.
Al nuevo Gobierno que se constituya, el Presidente de la FEMP le pide que tenga un “enfoque sobre las Corporaciones Locales diametralmente contrario al que hicieron en los últimos cuatro años”.
Caballero insistió en que “somos los Ayuntamientos y Diputaciones los que estamos cubriendo una gran parte de las carencias sociales que hay en España y, por tanto, demandamos más atención”. Añadió que “queremos hacer planes de empleo, y esto significa una financiación diferenciada y una legislación distinta, tener la capacidad de seguir siendo esta Administración tan bien gestionada y tan eficiente y que cumple tan bien con los ciudadanos y poder llevar adelante y cubrir las carencias de la Comunidades Autónomas y la Administración del Estado”.
Fuente: FEMP
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