Reivindica haber reformado la institución desde 2011.
«La ley de reforma local no se atrevió a plantear más fusiones de ayuntamientos». Así de claro se mostró el presidente de la Diputación de La Coruña, Diego Calvo, al ser preguntado por el balance de la fusión Oza-Cesuras, que juzga como un éxito. «No tiene sentido el número de municipios que hay», afirmó, a la vez que recordó que Francia ya ha emprendido reformas orientadas a la simplificación administrativa. «Me alegra que en Oza-Cesuras —comentó Calvo— se hubiese visto que no hubo un terremoto, que la gente seguía caminando por la calle. Sirvió para aclarar el camino». «Queda pendiente que se hubiese contagiado mucho más», lamentó.
En un desayuno organizado por la Asociación de la Prensa de La Coruña, reivindicó la Diputación como «una buena institución» que, cuando tomó sus riendas en 2011, era «muy poco ágil, muy presidencialista, parecía un laberinto» y a la que cree que consiguió dar «un vuelco importante» hasta convertirla en «la institución de referencia para los Ayuntamientos».
Diego Calvo no pudo evitar responder sobre la situación del alcalde de Santiago, Ángel Currás, tras la dimisión de ocho miembros de su grupo de gobierno, siete de ellos inhabilitados. «Le pido que piense bien lo que quiere hacer y que decida», aseveró tras ser preguntado sobre si Currás debería reconsiderar su decisión de no dimitir.
Fuente: ABC
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